2025 TINTO EN SANGRE
AUNQUE LA NARRATIVA… de los tres niveles de gobierno, siempre hable de tendencias a la baja en los índices de inseguridad y criminalidad, los hechos refutan esos dichos.
Y el caso de Cajeme, no es la excepción, porque aunque el alcalde CARLOS JAVIER LAMARQUE CANO, siga diciendo que vamos muy bien porque los índices de homicidio doloso bajaron, según él, en un 55 por ciento, nosotros vemos que prácticamente todos los días truena la metralla y siguen cayendo hombres, mujeres, niños y ancianos, producto de las balas del crimen organizado, algunos de ellos totalmente inocentes, de esos que ni la debían ni la temían.
Y para muestra un botón. Resulta que en el mes de enero del año pasado, se suscitaron 25 homicidios, en tanto a los tres días del mes enero actual, ya llevábamos 10 homicidios y precisamente ese día fue de terror poque mataron a cinco cristianas y cristianos.
Uno en Villa Bonita, otro en La Palmita y los otros tres en la calle Fernando Montes de Oca, de la colonia Faustino Félix, donde por cierto se incluyeron entre las muertas a dos mujeres.
Con este desastre en el tema de seguridad, lo menos que podemos pensar es que el alcalde tenga pensado llevar a cabo un cambio radical en la estructura de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, donde por lo menos se despida al secretario del ramo, el marino CLAUDIA CRUZ HERNANDEZ, pero resulta que es todo lo contrario porque ayer el propio alcalde Lamarque dijo que, en el homenaje a los policías caídos en el cumplimiento de su deber, llevado a cabo frente el edificio policial de la 300 y Jalisco, que estaba encantado con el trabajo de Claudio Cruz, lo cual nos pareció una aberración y una incongruencia total, por lo números que le presentamos.
GASOLINA CARA… Y a la que de plano tampoco le entendemos ni papa, es a la presidenta de la república, CLAUDIA SHEINBAUM PARDO, cuando dice que en términos reales la gasolina no ha subido desde el 2018. Si en ese tiempo cuando tomó posesión el hoy expresidente ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR, la gasolina costaba alrededor de los 18 y 19 pesos, y ahora cuesta entre 25 y 26 pesos, incluso en algunas gasolineras del país nos dicen que casi le pega a los 30 pesos.
O sea, esos 6 ó 7 pesos mas que pagamos por litro tangiblemente, que salen de nuestras bolsas, no son términos reales, entonces que nos explique de que tipo de términos se trata, si, repetimos, el dinero sale de nuestros bolsillos. Ahora se justifica diciendo que solo han sido aumentos de acuerdo a la inflación, pero lo que la señora nunca dice que de esos 25-26 pesos que pagamos por litro de gasolina, caso 10 pesos corresponden al impuesto que le pagamos al gobierno federal, cuando en Estados Unidos, el pago por litro de ese impuesto es de solo 2.5 pesos, obvio el equivalente en dólares, pero es muchísimo menos.