EL ZANCUDO
Por Arturo Soto Munguía
Un gran despliegue de solidaridad se ha extendido por todo México para con los hermanos guerrerenses víctimas de la devastación causada por el Huracán Otis que, como suele ocurrir en este tipo de desastres, nos pone a prueba a todos.
Pero especialmente a un gobierno ensimismado en el cortoplacismo de sus afanes sucesorios, que lo llevó primero a desestimar el ciertamente sorpresivo escalamiento en la categoría del meteoro que en unas cuantas horas se convirtió en un monstruo que destruyó la ciudad de Acapulco, su zona dorada y ni se diga de barrios y cañadas donde habitan los más pobres.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado se mantuvo ausente durante las primeras horas después del fenómeno y el propio gobierno federal tardó en reaccionar y lo hizo mal; el presidente Andrés Manuel López Obrador decidió viajar por tierra a la zona del desastre y lo único que consiguió fue ofrecer la estampa que inmortalizará al primer mandatario a bordo de un vehículo atascado en el lodazal y con los militares encima tratando de sacarlo de la embarazosa situación.
Luego siguió la clásica narrativa multiusos sobre la corrupción del pasado que se aprovechaba de los recursos del Fonden para engordar las cuentas de funcionarios públicos y políticos de toda laya pero no para resolver las angustias de los damnificados.
Algo habrá de razón en esos señalamientos, sin duda, pero lo cierto es que tras la extinción del fideicomiso del Fonden que contaba con más de 50 mil millones de pesos, el actual gobierno destinó más de 30 mil millones para las obras del Tren Maya y dejó el nuevo fondo con 17 mil millones de los que por cierto hasta ayer no se habían tocado para aplicarlos a la reconstrucción de las zonas devastadas y la ayuda humanitaria para quienes lo perdieron todo.
Pero llama la atención el discurso que alude a la corrupción del pasado, montados sobre el blanco corcel de la transparencia y la rendición de cuentas del presente, como si no existiera Segalmex y los 15 mil millones de pesos cuyo destino se desconoce; como si no se hubieran robado -fíjese usted qué paradoja- los bienes del Instituto para Devolver al Pueblo ¡lo robado!; como si no fuera este el gobierno que más reservas de información ha hecho sobre los recursos por miles de millones de pesos de las llamadas obras estratégicas; como si no los hubieran pillado en transacciones en cash para el financiamiento de campañas o como si no hubieran sido videograbados en un ‘carrusel’ de depósitos en efectivo para alimentar un fideicomiso creado por Morena precisamente para ayudar a los damnificados del sismo de 2017.
Esos depósitos se realizaron el 28 de diciembre de 2017 por seis personas en 28 operaciones de 50 mil pesos cada una en la sucursal San Ángel de Banco Afirme, en la Ciudad de México, que en conjunto sumaron un millón 400 mil pesos en efectivo. Los depósitos se realizaron en 20 minutos, entre las 16:26 y las 16:47 horas de aquel día.
Hoy, por disposición presidencial, toda la ayuda que se canalice a los damnificados por el huracán Otis en Guerrero serán administrados por la Sedena y la Semar; excluyendo a gobiernos locales y sobre todo a organizaciones no gubernamentales.
Aun así, en todos los estados se han comenzado a organizar centros de acopio para enviar ayuda de todo tipo a Guerrero. En Sonora no es la excepción y cuenta doble porque sucede que en Acapulco se encontraban alrededor de mil sonorenses participando en un foro sobre minería; afortunadamente no hay reportes de muertos o desaparecidos en ese contingente, donde se encontraban algunas colegas como Soledad Durazo, Sandra Romandía y Wendy Avilés; mucha gente del sector minero y hasta la secretaria de Economía, Margarita Vélez de la Rocha.
Desde su viaje por Bélgica y Países Bajos, el gobernador Alfonso Durazo giró instrucciones para que se apoyara a los sonorenses atrapados en aquella tragedia, enviando autobuses desde Ciudad de México para sacarlos de la zona de desastre y regresarlos a Sonora, desde donde se ha mantenido comunicación permanente con autoridades de Guerrero para agilizar el traslado.
En todos los municipios de Sonora se instalaron centros de acopio en apoyo a los damnificados, por parte del DIF Sonora.
El DIF Hermosillo también se sumó a las acciones del DIF estatal y la Cruz Roja para hacer acopio de víveres y productos no perecederos que serán enviados a las zonas afectadas; los módulos estarán operando en las oficinas del DIF municipal en Gustavo Hodgers 56 en la colonia Modelo, de lunes a viernes; el del DIF estatal se encuentra en Bulevar Luis Encinas y Monteverde, y otros más en las plazas Zaragoza, de los 100 años y Alonso Vidal.
II
Para nada desdeñable el vacío que Morena le hizo a su virtual candidata presidencial, Claudia Sheinbaum en el estadio Azul. La dejaron sola.
No recuerdo algún evento de un candidato presidencial que se haya suspendido por falta de público. Puede haber sucedido, pero no lo recuerdo.
En la ciudad más politizada y más cargada a la izquierda, los liderazgos de Morena le hicieron el vacío a su candidata y la razón es Clara: no quieren a Omar García Harfuch como su candidato a la jefatura de gobierno, pese a ser el mejor posicionado en las encuestas.
Lo consideran distante de los postulados que definen la militancia en Morena y peor aún, lo consideran un policía, con todo lo que ello implica para un movimiento que durante décadas aportó los muertos, desaparecidos, reprimidos, encarcelados y torturados por las falanges bajo el mando del padre y el abuelo de ese precandidato.
Cosa rara. Al obradorismo de izquierda en Ciudad de México no le gustó la decisión de Sheinbaum, que se decantó por su jefe de policía; el propio López Obrador nunca lució muy convencido de que era la mejor opción para darle continuidad a su proyecto en la capital del país, pero asumió que una vez otorgado el ‘bastón de mando’ a Claudia tendría que aceptar las decisiones que comenzara a tomar. Una de ellas fue apoyar a García Harfuch.
No es un asunto menor. En 2021 Morena perdió más de la mitad de las alcaldías en la capital. Hoy, el pragmatismo indicaría que García Harfuch reconciliaría a Morena con ese electorado que les volvió la espalda hace dos años, pero los sectores duros del partido no están dispuestos a claudicar en lo programático por lo pragmático.
Se lo hicieron saber Clara-mente al dejar sola a Claudia en el Azul y eso obligará a replantear muchas cosas en Morena que, conforme se acerca el tiempo de las definiciones, parece estar pasando por uno de sus momentos críticos como partido.
No solo es el vacío que le hicieron a Claudia en el Estadio Azul. Es la renuncia de la senadora Lucy Meza a Morena, que irá como candidata del FAM a la gubernatura de Morelos; también la de otra senadora, Cecilia Sánchez quien se pasó a la bancada del PRI y la de Malú Micher, pieza clave en el equipo de Marcelo Ebrard.
Movimientos raros en un contexto donde lo usual es que opositores renuncien a sus partidos para sumarse a Morena, pero lo excepcional es que morenistas renuncien a su militancia para sumarse a la oposición. Algo está sucediendo y todavía faltan ocho meses para la elección presidencial.
También me puedes seguir en Twitter @Chaposoto
Visita www.elzancudo.com.mx