Por David Fuentes/Foto: Cuartoscuro/Galo Cañas Rodríguez
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Fue el pasado 20 de mayo por la mañana cuando Ximena y José fueron asesinados sobre la avenida Tlalpan; Ximena era la secretaria particular de la jefa de gobierno, Clara Brugada, y José, su jefe de asesores, ambos muy cercanos a la mandataria. El crimen cimbró la cúpula política de la capital del país y si bien, este miércoles se dio a conocer la detención de 13 presuntos responsables, el móvil del doble crimen sigue sin ser explicado por las autoridades.
El ataque, que quedó grabado en cámaras de seguridad, fue en cuestión de minutos; un solo gatillero primero mató a Ximena y luego a José, cuando éste presuntamente quería escapar. El cuerpo de Ximena quedó dentro de vehículo, un Audi negro y el de José a unos metros de ella, pero fuera del auto, luego el solitario sicario -que se disfrazó de un trabajador de obra- escapó en una motocicleta; este doble homicidio sin antecedentes fue calificado por expertos como un crimen premeditado, bien planeado, “casi perfecto”.
Según la fiscal Bertha Alcalde, sobre las víctimas dispararon 12 tiros en total de un calibre 9 milímetros; ocho de estos asestaron contra Ximena y cuatro contra José Muñoz. Las cámaras de vigilancia captaron cuando el agresor subió a una moto negra con placas del estado de Querétaro, en donde ya lo esperaba un cómplice, la misma persona que fue enviada a hacer monitoreo previo, el 14 de mayo, según revelaron las investigaciones y un análisis previo del lugar del crimen y los centros laborales y domicilios de las víctimas, si bien las cámaras captaron la fisonomía del agresor, su rostro, nunca fue expuesto.
“Se detecta por videovigilancia días previos la presencia de una persona en el mismo punto donde fue el ataque que podría haber estado realizando funciones de vigilancia del mismo punto. No se tiene detectada vigilancia en otro punto distinto a ese hasta el momento. Son de las cosas en las que estamos trabajando”, reveló Pablo Vázquez, jefe de la policía capitalina unas horas después del ataque.
La motocicleta fue abandonada a tan sólo 500 metros de los hechos, junto con otros objetos como casco y chalecos. Otro vehículo, una camioneta Nissan Kicks de color azul, relacionada con los hechos, trasladó a los responsables y posteriormente fue abandonada, pero estaba en calles de la alcaldía Iztacalco; ambos tenían reporte de robo de apenas unas horas antes de que se cometiera el crimen.
Luego de esto, la presidenta Claudia Sheinbaum ordenó una investigación exhaustiva para esclarecer el doble homicidio, así fue designado el secretario de seguridad federal Omar García Harfuch para esclarecer el crimen, un grupo “élite” elegido por García Harfuch comenzó a indagar, detectando que los agresores usaron un tercer vehículo, una camioneta Urvan blanca, que salió hacia el Estado de México, justo en el municipio de Tonanitla y de ahí no se supo nada más de los asesinos.
El asesinato de Ximena Guzmán y José Muñoz, secretaria particular y coordinador general de asesores de la jefa de Gobierno, Clara Brugada, fue un “ataque con alto nivel de planeación y experiencia operativa”, indicaron la fiscal Bertha Alcalde y el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez en un conferencia conjunta que dieron, 24 horas después que se iniciaran las indagatorias.
Los titulares de ambas instituciones señalaron que hubo la participación activa de cuatro personas: el sicario y tres más que facilitaron la logística de huida. Además, la SSC abrió una investigación interna en contra de dos mandos, por la presunta manipulación de indicios.
El mes pasado, al ser cuestionada sobre los avances al respecto, la fiscal Bertha Alcalde dejó en claro que no se fabricarían culpables ni se acelerarían las detenciones sin tener las pruebas para probar el delito.
“No vamos a fabricar culpables, no nos vamos a acelerar con las detenciones sin antes tener las pruebas necesarias para probar este delito ante los tribunales”, enfatizó.
En esa oportunidad, reiteró que se guardaría sigilo mientras se llevaran a cabo la investigación para no comprometer los resultados. La indagatoria se realiza entre autoridades capitalinas y federales.
TOMADO DE PROCESO.COM.MX