LOS NÚMEROS NO MIENTEN
LA ELECCIÓN… del domingo fue inédita e histórica, pues a pesar de que el gobierno de la Cuarta Trasformación insistió en que jueces y magistrados deben ser electos por el pueblo, a través de un proceso democrático, al final nadie se tragó ese cuento y le dieron la espalda a un proceso que estuvo viciado desde sus orígenes.
Ya ve usted lo que dicen: lo que mal empieza, mal acaba. Justamente eso es lo que sucedió; con una participación que apenas rebasó el 11 por ciento, eso nos deja con un 89 por ciento que se abstuvo de votar; aunque el gobierno de Claudia Sheinbaum se niega a aceptar que ese fue un gran mensaje de rechazo, al final de cuentas resulta por demás evidente que la elección no fue del agrado popular.
Pero más allá de la enorme abstención y aunque ahora algunos morenistas intentan culpar a los medios de comunicación de la carencia de votantes en las urnas, lo que nos viene dejando los números es muy aleccionador.
Nada más para que se de una idea de la farsa: los votos nulos fueron los verdaderos ganadores de la elección, se han contabilizado un total de 8.05 millones de votos nulos, mientras que el candidato más votado, Hugo Aguilar Ortiz, un abogado que forma parte del gobierno federal, “apenas” suma 3.8 millones de sufragios y con esa cifra se apunta para presidir la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
La votación fue muy magra, apenas un 11.41 por ciento, pero de los que fueron a emitir su sufragio, más del 22 por ciento anuló su voto o dejó el recuadro en blanco; lo anterior indica que al no conocer los perfiles y no estar convencido de la honestidad de aquellos a los que más se mencionaba, el ciudadano prefirió anular la boleta electoral.
Se puede decir que la elección fue legal porque está contemplada en la Constitución, pero quienes van a llegar a los cargos en disputa no tienen representatividad popular y esto a pesar de toda una operación de llenado de urnas, de acarreos a votar, de “acordeones” para inducir el voto a favor de determinados perfiles idóneos y ligados al Gobierno Federal, pero nada de eso sirvió para que la elección pudiera generar números medianamente adecuados para considerar que el resultado fue exitoso.
Lo que sí quedó claro es que el pueblo, ese al que tanto recurren, terminó por darle la espalda a un proyecto que surgió del revanchismo, del deseo de venganza y de la inquina contra un Poder Judicial que no se dobló.
Y si a nivel nacional los números no mienten, también hay que ver los de la elección local en Sonora, donde la señora Ana Patricia Briceño Torres se despachó con la cuchara grande y con el 95 por ciento de las actas computadas logró 113 mil 573 mil votos, es decir el 32.6 por ciento.
La señora Briceño Torres es todo un fenómeno electoral, pues a pesar de ser una perfecta desconocida para la gente, resulta que logró una cifra de votos muy cercana a la que logró la candidata de Morena a la alcaldía de Hermosillo, María Dolores del Río.
En Sonora la participación fue por debajo de la media nacional, mientras que en el país fue de 11.41 por ciento, en nuestro estado apenas participó el 9.29 por ciento del padrón electoral; esto significa que fueron a votar 225 mil ciudadanos y de estos, un poco más de la mitad votó por Ana Patricia Briceño.
Con esos números tan contundentes, en una elección donde el electorado desconocía a los candidatos en la boleta, el caso de Ana Patricia Briceño es todo un ejemplo de que a veces a los operadores se les pasa la mano.
Si Morena necesitaba un perfil ganador para Hermosillo, ahí tienen a la señora Briceño Torres que con una poquita de gracia y otra cosita puede conquistar al electorado más difícil y renuente a votar.
¿PARA QUÉ METEN EN LÍOS AL GOBERNADOR? Hay muchos casos documentados de funcionarios en el gobierno de Sonora que ante su carencia de oficio recurren a achacarle decisiones al gobernador Alfonso Durazo, que ellos tomaron pero para darles cierto nivel de autoridad no se hacen responsables de las mismas y le echan la bolita al Gobernador.
Estas situaciones lo único que consiguen es desgatar la imagen del gobernante al tiempo que lo vuelve impopular y lo hace ver autoritario o carente de sensibilidad.
El nuevo caso lo estelariza la señora Beatriz Aldaco, directora del Instituto Sonorense de Cultura (ISC), quien decidió, “muy por sus pistolas”, desalojar al Grupo Antares de Danza Contemporáneo de un espacio que ocupaba en la Casa de la Cultura de Sonora.
En la columna que escribe en el periódico “Excelsior”, Humberto Musacchio relató lo siguiente:
“Vuelve a las andadas la señora Beatriz Aldaco, directora del Instituto Sonorense de Cultura. Pues ahora se le ocurrió desalojar en forma perentoria el espacio que ocupaba el grupo Antares Danza Contemporánea en la Casa de la Cultura de Sonora.
“Para justificar su draconiana disposición, la funcionaria dijo que seguía “indicaciones directas” del gobernador Alfonso Durazo para “democratizar el uso de espacios culturales”.
¿De veras? Antares es un grupo de danza que goza de amplio reconocimiento en la República Mexicana y en una decena de países donde se ha presentado exitosamente”.
“Además de sus altas cualidades artísticas, ese grupo que dirige Miguel Mancillas ha desplegado una tenaz actividad en sus 38 años de existencia, capacitando a más de 500 jóvenes en el arte coreográfico y creando un público para el ballet en el estado de Sonora.
Por supuesto, no puede creerse que un hombre de cultura como Alfonso Durazo haya ordenado una barbaridad como la dispuesta por Beatriz Aldaco, quien por lo visto desconoce lo que es una compañía de danza, sus rutinas, proyectos, aportes y necesidades de todo orden”.
Coincidó en que esto no puede ser obra del gobernador Alfonso Durazo y sí estoy convencido que se trata de una decisión muy personal de la señora Beatriz Aldaco, por alguna inquina, rencilla o deseo de venganza que le nubló la razón y la llevó a cometer la arbitrariedad.
UN AÑO DE LA REELECCIÓN… La reelección de Toño cumple un año
Hace un año, en una elección histórica, los hermosillenses decidieron ratificar la confianza en Toño Astiazarán y con una carretada de votos jamás lograda por otro candidato, consiguió lo que nadie había logrado, ser reelecto como presidente municipal de la Capital sonorense.
Toño Astiazarán, aunque a muchos no les agrade y parece que hasta les molesta, llega a su primer año de ser reelecto como el alcalde mejor evaluado por los ciudadanos a nivel nacional, una situación que viene generando una percepción muy positivo en distintos aspectos del gobierno municipal que encabeza; pero que además de ser el mejor evaluado, también celebró este primer año de reelección recibiendo dos premios internacionales.
El primero es el reconocimiento “We Love Cities 2024” que otorga la World Fund for Natura (WWF), que le fue entregado al alcalde por Álvaro Rodríguez, representante en México de dicha organización.
Este reconocimiento es por conseguir un alto nivel de participación ciudadana y compromiso en mejorar su sostenibilidad y que las acciones para proteger el medio ambiente, impulsar la movilidad sostenible, y mejorar el bienestar de sus habitantes han tenido un impacto positivo, lo que la confirma como un modelo a seguir.
Ayer lunes, el alcalde Toño Astiazarán recibió el distintivo mundial “Tree Cities Of The World”, por acciones de innovación en reforestación y mantenimiento de árboles, este reconocimiento tiene sustento en la plantación de 70 mil especies nativas en toda la demarcación municipal, algo que atrajo la atención de “Arbor Day Foundation”, organización de Estados Unidos que junto con la ONU otorgan el distintivo.
Actualmente en América Latina se distingue a un total de 40 ciudades con este distintivo, de las cuales Hermosillo forma parte gracias al compromiso de Gobierno y sociedad.
La Capital de Sonora se suma a ciudades innovadoras que realizan acciones a favor del medio ambiente como Madrid, España; Washington, Estados Unidos, Toronto, Canadá; Medellín, Colombia, Sao Paulo, Brasil, entre otras.
GANÓ EL PAN… El domingo por la noche, Morena cantaba una victoria contundente en Durango, donde se realizó la elección de Ayuntamientos; al paso de las horas los números vienen dando otros resultados, la Coalición Unidad y Grandeza, integrada por PAN-PRI se perfilan como los amplios ganadores al obtener 236 mi 481 votos contra 190 mil 081 votos de Morena y sus aliados.
La Coalición ganó Durango, Morena obtuvo el triunfo en Gómez Palacio, pero perdió Lerdo y Movimiento Ciudadano le arrebató Tlahualilo; el PRI-PAN gobernarán 20 municipios, 15 en coalición y 5 del PRI; Morena -PVEM-PT en alianza gobernaran 14 municipios y 2 son para Morena en solitario, mientras que Movimiento Ciudadano pasó de gobernar uno a tres.