HUELGAS EN UNIVERSIDADES, UN TEMOR ANUAL
APENAS HIZO BIEN… el gobernador Alfonso Durazo en atender personalmente a los integrantes del Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Universidad de Sonora (STEUS), quienes se manifestaron en palacio de gobierno para exigir apoyo en las negociaciones con la autoridad universitaria, acostumbrada a decir que no hay dinero ante los emplazamientos de sus sindicatos.
Y decimos que apenas hace bien el gobernador, porque tradicionalmente, la reacción de palacio de gobierno ante la mirada del trabajador universitario, es también de una negativa a erogar mayores recursos:
“… No hay dinero”, es la respuesta recurrente.
Y entonces, ¿ahora sí habrá dinero?, porque Durazo expresó ante los reporteros que cubren su conferencia semanal que “de acuerdo a sus facultades y hasta donde los límites se lo permitan, apoyará a la máxima casa de estudios, que, por mucho, es la institución de instituciones”.
Sin embargo, hasta ahora no entendemos la razón por la que las y los integrantes del Congreso del Estado, no contemplan en su aprobación del presupuesto anual de la UniSon, un recurso para atender a sus sindicatos cuando se presenten los emplazamientos a huelga.
Nuevamente, estamos ahora ante una revisión contractual, como cada año. Y enseguida se presentará el emplazamiento del STAUS, -el sindicato de maestros- y las respuestas de la rectora Rita Plancarte y otros directivos será la misma: “No hay dinero”.
Las y los diputados locales deberían de generar esa “bolsa”, etiquetada para elaborar respuestas a los sindicatos. Y deberían hacerlo por los más de 30 mil estudiantes universitarios que, año con año, viven la tensión de quedarse sin clases ante la posible paralización de actividades académicas y administrativas.
Ya existe una experiencia de este gobierno estatal en el 2023. En su momento, los sindicatos hicieron a un lado la mediación de palacio ante la incapacidad para conciliar y resolver. ¿Quién le garantizará al gobernador Durazo que este 2024 sí habrá eficacia en ese operativo? Nadie.
OTRA AMENAZA… de huelga en una institución de educación superior en Sonora está a la vuelta de la esquina… Se trata de la Universidad Estatal de Sonora (UES) y esta sí depende completamente del Gobierno del Estado, porque está dentro de su estructura… Ayer trascendió que luego de cinco pláticas entre autoridades y el sindicato encabezado por Martín Terán Gastélum, se “rompieron” las conversaciones…
Pero aquí las razones de un posible estallamiento no se basarán en la falta de recursos, sino en la incapacidad de sus actuales directivos encabezados por el “bulto”, Armando Moreno Soto… Éste último tiene la costumbre de “llamar” a los conflictos… El problema es que cuando los tiene enfrente, no puede resolverlos por sus inocultables limitaciones… En fin… Sigue como rector de la UES a pesar de que es todo un dolor de cabeza.
NO PODEMOS… permitirnos perder la capacidad de asombro… Una tragedia en Sonoyta con el ataque a un grupo de maestros y el resultado fatal en uno de ellos… Siete muertos en un enfrentamiento en el Golfo de Santa Clara (San Luis Río Colorado), un ataque a una conocida y reconocida empresaria de Caborca – Blanca Buentello- quien se debate entre la vida y la muerte… Poco antes, un ataque en Caborca a jornaleros agrícolas con la muerte en número de cuatro y otro ataque más a migrantes con la muerte de un niño y dos mujeres…
Los homicidios dolosos y ejecuciones están de regreso en Cajeme… ¡Y no hay reacción alguna de parte del gobierno en sus tres niveles! … Los muertos son números, estadísticas, como instrumentos para hacer declaraciones presumiendo una reducción en el número de homicidios dolosos e insistir en que “quien se porte bien, no tiene nada qué temer”, cuando las víctimas colaterales de esta violencia son muy numerosas… ¡Qué tristeza!… ¡Qué impotencia y qué insensibilidad!